Como otros años, ayer participamos en la ceremonia del río Genil, lanzamos pétalos de rojas y velas encendidas en memoria de tantos gitanos perseguidos, expulsados… y como compromiso de trabajar por una sociedad global donde todas las personas y todos los pueblo puedan moverse libres, sin fronteras, como tampoco los ríos las conocen. Ojalá este sueño se vaya haciendo realidad.




